miércoles, 14 de octubre de 2009

LA LUCHA EN TERRABUSI

Kraft - Terrabusi:



Seguir peleando hasta ganar

Esta heroica lucha ya en tró en la historia del movimiento obrero argentino. Fueron 37 días de paro en los tres turnos. Una represión violenta, que hacía años no se veía, que conmocionó a todo el país. Los programas de tele, radios, diarios, todos hablan de Terrabusi. Esta lucha obrera tapó el tema de la ley de medios K, los problemas del seleccionado y las malas campañas de Boca y River. El Ministerio de Trabajo y el gobierno nacional se vieron obligados a intervenir. Hasta Moyano y la CGT dicen ahora que «apoyan a los trabajadores de Kraft”...
El lunes 5, 29 compañeros despedidos entraron a trabajar. Y ayer martes, el Ministerio y la empresa informaron que entrarían otros 20 compañeros. Hayque seguir apretando con nuestra lucha, sin tener ninguna confianza en las negociaciones. Llegamos hasta acá luchando, y solo así vamos a lograr entrar todos.

Una lucha histórica

Hacía muchos años que una pelea obrera no adquiría semejante repercusión y se transformaba en un hecho nacional. No pudieron derrotarlos con los despidos, las sanciones, el hambre ni los aprietes. Tampoco con la represión. No pudieron aislarlos ni tapar
la fuerza de la lucha.
La solidaridad obrera y popular no paró de crecer. Cortes, marchas, todo tipo de muestras de apoyo se extienden por el país. Los empresarios y sus aliados se ponen nerviosos. No quieren que el ejemplo se extienda.
Por eso interviene Tomada, el ministro bonaerense, el gobierno nacional y ahora hasta el propio Moyano. Por eso aparecen las primeras listas de reincorporaciones.
Pero no hay que dejarse engañar. La patronal sigue durísima. No termina de aflojar. No quiere a los delegados y a la interna en la planta. Mantienen su plan de reducir un turno y despedir cientos de compañeros. Quieren avanzar con la esclavitud laboral y por eso no dudaron en convertir la fábrica en un campo de concentración, tratando a los trabajadores como prisioneros de guerra.

Fuera la policía y basta de aprietes

A pesar de todas las promesas, la policía sigue dentro de la planta. Se los puede ver en todos lados, y a veces hasta en el comedor. Cuando se juntan dos o tres compañeros se acercan los “líderes” para apretarlos. En las reuniones con el Ministerio se hacen muchas actas que dicen que la policía se va a ir, pero todavía están adentro. ¡Que se vayan ya mismo de la fábrica! ¡Que no quede ni un solo policía!
Y basta de perseguir a los compañeros y compañeras. Ni los “líderes” ni la seguridad privada pueden seguir apretando a los trabajadores. Plena libertad para conversar y hablar entre los compañeros.
Hay que seguir la lucha hasta que entren todos. Si la empresa no cumple, el gobierno tiene que nacionalizar Kraft y ponerla a producir controlada por sus trabajadores.
No podemos bajar la guardia. No podemos confiar solo en las negociaciones. Si avanzamos hasta acá, es porque nos mantuvimos firmes en nuestra lucha. Ahora hay que seguirla. Si Moyano dice que nos apoya, que la CGT convoque ya mismo un paro nacional por Terrabusi. Hay que seguir con los cortes y marchas de solidaridad. Seguir junto a los trabajadores de adentro y ahora apoyados por los compañeros que van entrando.
Seguir unidos y organizados. Y exigir que la comisión interna ingrese ya mismo a trabajar.
Si la empresa no cumple, no sirven las multas. Es verso. Si la patronal yanqui no cumple las resoluciones del Ministerio de Trabajo nacional, el gobierno tiene que declarar de utilidad pública la empresa, expropiarla y ponerla a funcionar bajo el control de los trabajadores y sus delegados, para que los productos de Kraft se distribuyan en los colegios, hospitales y a toda la población. Van muchos días de lucha, pero no hay que aflojar. Esta lucha termina cuando entren todos los compañeros despedidos.



Carlos Ugarte